Miles de veces (exageré, no creo que tantas) he escuchado promesas de cura de la diabetes, cualquiera que sea su tipo y, por el otro lado, opiniones que descalifican, como de rayo, cualquier aseveración al respecto. Dicho en buen refrán, “la burra no era arisca, los palos la hicieron” y no es porque la postura de desconfianza sea inamovible, pero cada vez que alguien pregona la tan esperada cura, siempre aparece el pero que provoca la reacción de desconfianza.
Así pues que cuando alguien anuncia una cura para la diabetes, los que ya hemos pasado por un proceso de estudio de la enfermedad, sus causas y consecuencias, lo menos que hagamos sea levantar la ceja en gesto entre burlón y desconfiado, esperando escuchar una de dos: o se trata de algún fanático con un discurso anti medicina alópata o alguna investigación que “va bien encaminada, pero…” A esta última categoría pertenece la entrada de hoy, sobre una investigación seria, basada en ciencia y biología (que para el caso son lo mismo) y que salió publicada hace algunos días bajo el pomposo título “Científicos de Harvard hallan enzima que podría curar diabetes tipo 2”
La principal limitación para resolver un problema es, primerísimamente, nuestra capacidad para entenderlo. La diabetes no es la excepción y hasta la fecha se han definido muchísimas pistas que apuntan a qué la produce, cómo evoluciona, qué tejidos involucra y cuáles interrelaciones tiene con respecto a diferentes sistemas de funcionamiento del organismo. Así pues sabemos que no solo se trata de problemas para controlar la glucosa en sangre, que es lo que la define desde la antigüedad, sino el cómo afecta el funcionamiento y equilibrio de órganos y productos orgánicos que el cuerpo sintetiza. Por ello la diabetes ha dejado de ser un problema de manejo de glucosa que puede manifestarse en extremos tales como la ausencia de producción de insulina, propia de la diabetes tipo 1, hasta un exceso de producción de ésta, propia de la condición conocida como resistencia a la insulina o diabetes tipo 2, para evolucionar hacia un problema que deriva en problemas de la correcta producción y metabolismo del colesterol y los triglicéridos. Otros desbalances están relacionados con la producción excesiva de antioxidantes, interconectados con cuadros alérgicos (asma el más frecuente), deterioro celular acelerado en todo el cuerpo y, se sospecha que incluso dichos antioxidantes sean precursores directos de la cardiomiopatía diabética. Por ello, todo lo que aporte a entender cómo funciona el cuerpo humano, suma para tener la base que nos permita entender el problema de la diabetes.
El artículo arriba citado se refiere a una investigación del Centro Joslin para la Diabetes en la Universidad de Harvard -que dicho sea de paso el centro mencionado se define como el mayor centro de investigación en diabetes del mundo- y que el pasado 22 de este mes publicó una noticia cuyo título es “Joslin Researches Identify New Target for Treatment of Type 2 Diabetes and Prediabetes” (algo así como “Investigadores de Joslin Identifican Nuevo Objetivo para el Tratamiento de la Diabetes Tipo 2 y Prediabetes”). Por supuesto que desde el título el significado que el propio Centro Joslin le da a su comunicado es TOTALMENTE diferente que el publicado por la prensa, aunque en el contenido del artículo de prensa no se desvirtúa tanto el mensaje.
Pero entrando en el tema y entornando los ojos al cielo pues de nuevo habrá que ser un poco técnicos en el lenguaje, la historia de hoy es sobre una enzima llamada Sirt3, de la familia de proteínas llamadas Sirtuinas y que en los humanos se localizan en la mitocondria celular. Para darnos una idea de la importancia del descubrimiento, diremos que las mitocondrias celulares son responsables de la producción del 95% de la energía de nuestro cuerpo y es en estos pequeños corpúsculos de la célula en donde, una vez captada por la acción de la insulina, la glucosa se transforma en la energía que nuestro cuerpo usa. Pues bien, los investigadores comprobaron que existe una notable disminución de la enzima Sirt3 en las mitocondrias de pacientes con prediabetes y diabetes tipo 2, particularmente de las células de los músculos y apunta esta disminución a ser una de las posibles causas de la resistencia a la acción de la insulina, que es la fase previa a la diabetes 2.
La meta del estudio será encontrar, se espera que en un cercano futuro, cómo restablecer los niveles de la Sirt3 en la mitocondria o, en todo caso, hacer más efectiva la que hay presente. Faltaría definir sobre cuáles proteínas específicas actúa la enzima Sirt3 y qué tanto. Ello no podrá presumirse como la cura para la diabetes, pero podría llevar al desarrollo de un fármaco específico que sirva como un tratamiento adicional que, en algunos casos, incluso pudiera revertir algunos de los efectos adversos de la diabetes 2. En casos de prediabetes y para los recién diagnosticados como diabéticos tipo 2, pudiera ser de mucha utilidad un tratamiento a nivel celular.
Finalmente regresamos al punto de partida en donde la postura del escéptico se tiene que sostener por sí misma. Precisamente el éxito de los productos milagro se basa en ese deseo que tenemos los seres humanos de oír con mejor claridad los mensajes que nos dulcifican la ilusión y por ello tienen tanto auge. Además como hoy se pudo ver, el afán periodístico de captar lectores, también puede llevar a difundir una noticia científicamente seria y por demás interesante, a ser desechada a primera vista, por usar efectos sensacionalistas para anunciarla, pudiendo provocar falta de interés en el tema, pues resultaría en una nueva decepción. No hubo lo que queríamos leer, no hubo cura para la diabetes, no importa que tan importante sea el hallazgo.
Hola Zoocrates, me ha encantado el diseño de tu blog, la verdad que pocos se encuentran tan bien estructurados y redactados -a mi parecer :) - En éstos de los nuevos tratamientos tienes razón en decir que siempre nos queda el fantasma de la duda, me he dado cuenta, por lo que publicas, que te has documentado bastante acerca de la diabetes, es por ello que me gustaría pedirte tu opinión acerca de éste contenido, para mí es muy importante. Gracias http://tinyurl.com/vencer-diabetes
ResponderBorrarGuadalupe:
ResponderBorrarMi gracias primero que nada, por leerme. Adicional, por tu opinión tan generosa por la presentación y particularmente, sobre el contenido de este tu sitio.
Revisé la liga que me pides analizar y luego de leerla, me temo que mi opinión al respecto no es favorable. Quien promueve la página, utiliza exactamente todos los ingredientes de un mensaje de charlatán de feria. Son precisamente los que hablan de "complot", "intereses de laboratorios", "lo que los científicos ocultan", etc. los que pretenden engañar al usar medias verdades, citar opiniones del tipo "un prestigiado investigador ...", "ha publicado en diversas revistas...", "reconocido mundialmente...".
Leí el panfleto electrónico y lo que encontré fue una gran ignorancia sobre qué es la diabetes y su dinámica en el cuerpo humano, a la luz de las investigaciones realmente actualizadas y disponibles en revistas especializadas en medicina (como ejemplo ver la cita que hago en este mismo blog sobre la investigación del Centro Joslin). De hecho, usa conceptos médicos utilizados a mediados del siglo pasado donde poco se sabía sobre la dinámica de la diabetes y el sistema endocrino, además de que aparentemente no entiende la diferencia (muy importante), entre la diabetes tipo 1 y la tipo 2.
Hoy en día se sabe que, en el caso particular de la diabetes tipo 2, una dieta sana, rica en fibra vegetal, baja en proteína y carbohidratos de bajo índice glucémico, combinada con ejercicio regular, son parte ineludible de un correcto tratamiento de ésta, junto con el medicamento y una cultura de aprendizaje sobre la enfermedad. Bajar de peso, comer bien y hacer deporte, contribuyen enormemente a mejorar la salud en lo general y, por supuesto, conducen a una menor cantidad de medicamento y mejoras en la presión arterial y control de lípidos (colesterol y triglicéridos), lo demás lo hace la correcta atención de un medico.
Quizá el documento que promueve lo que tenga (adicional a un montón de palabrería hueca), sea una guía de alimentación y ejercicio, que siempre serán de utilidad (aunque creo que yo ya lo dije sin vender nada) y si trata de "vender" alguna cosa, lo que sea, para tomar, mucho cuidado, pues de seguro tendrá algún "ingrediente secreto" y no puedes saber el riesgo potencial de tomarlo. Por mucho que queramos criticar a la industria farmacéutica, siempre encontraremos la fórmula detallada de todos los medicamentos y jamás "ingredientes secretos". Si la decisión fuera mía, lo desecharía.
Entiendo que todos queramos oír que hay quien nos pueda curar la diabetes, pero... a los criminales que más detesto es a los vendedores de ilusiones pues no solo roban a los enfermos con venta de basura inservible, sino que al mismo tiempo les roban la posibilidad de acceder a un correcto tratamiento para una enfermedad que hasta la fecha no tiene cura conocida, pero es absolutamente tratable. Un abrazo solidario.